UNA NUEVA SIEMBRA

Hoy meditaba en ese refrán muy conocido de “cosechamos lo que ayer sembramos”, en efecto yo diría “hoy pagamos lo que ayer gastamos”.

La vida es un sumar y restar de errores, es una balanza en la que se mide lo bueno y lo malo de nuestras acciones; es como una ecuación matemática que tratamos de balancear cuando reconocemos que necesitamos un cambio.

Siempre los cambios son buenos porque nos quitan el pesimismo y ese desaliento que ha veces asalta a nuestros sentidos, es por eso que el primer paso a seguir es reivindicar el futuro y buscar detenidamente que es lo que realmente nos hace o hiciera felices en la vida.

En este tiempo, ver la televisión, escuchar la radio, leer los periódicos, abrir nuestra conexión del Internet nos traslada a mucha información tóxica que en lugar de levantar nuestro espíritu, nos sumerge en un mar de eventos catastróficos, somos testigos de una violencia que cada vez se propaga en el mundo entero; eso lo único que nos deja es un sabor amargo y bloquea nuestra mente a buscar algo positivo, pues nos hacemos a la idea que ya no existe nada en que podamos creer o confiar, hasta podríamos decir que se predice un final al que nadie puede detener.

Hoy he decido que haré unos cambios, empezaré por lo menos por una semana, a alejarme de toda la información que considere no me hace bien y que por el contrario aumenta mi pesimismo. Voy a dedicarme a retomar todo lo que vea que ha sido abandonado y que necesita de mi cuidado.

Voy a empezar una nueva siembra, espero que esta vez, la cosecha sea más productiva que las anteriores.


Comenzar es vivir
BriznaDpaz (Autor)
Febrero 06, 2009

MIS BATALLAS….

El tiempo pasa despacio es una espera lenta, el reloj parece detenerse y los minutos parecen años; como lo son los años que han pasado y se han vivido con la angustia de que puede ser hoy o mañana, que suceda algo inesperado.

Es una batalla entre la esperanza y el miedo; entre la fe y la desconfianza; entre la rebeldía y la aceptación. Así van pasando los días y los años, viviendo a pasos recortados; tratando de encontrarle alegría a la vida, fortaleciendo el cuerpo y motivando el espíritu para seguir combatiendo, y encontrar la paz interior.

Mis batallas son y han sido, unas largas y otras cortas, todo depende de quienes estén en el campo de guerra, hoy me han parecido que eran “el miedo y la esperanza”. El miedo paraliza, el miedo esclaviza, pero en ciertas ocasiones es necesario sentirlo para demostrarnos que todavía estamos vivos.

A veces me pregunto:
¿Podrá el miedo vencer la esperanza?

Yo diría que depende de nuestra fortaleza ya que a veces el sentir miedo nos llena de coraje, de fuerza que nos impulsA a buscar en algo que al principio de nuestra lucha no reconocemos, y es NUESTRA FE.

Apoyarnos en nuestra fe no es una debilidad, como tampoco creer que hay un Ser Supremo que nos acompaña siempre no es vergüenza decirlo.

Hoy más que nunca sentí miedo a lo desconocido, pero al mismo tiempo pude gritar a todo pulmón: que creo que la esperanza no muere antes que el cuerpo desfallezca.

Comenzar es vivir

Memorias de BriznaDpaz
Febrero 01, 2009